Dedica principalmente su explotación al cultivo de cereal (trigo, cebada…) y a cultivos forrajeros y proteaginosos (alfalfa, vezas y guisantes). Y aunque principalmente trabaja la explotación familiar, aún saca algo de tiempo para realizar alguna labor a terceros. Las más de 700 Ha que trabaja en las inmediaciones de Autilla del Pino (Palencia), presentan las particularidades climáticas de la Tierra de campos, escasez de lluvias, con inviernos fríos y duros, veranos secos y calurosos (con temperaturas extremas en muchas ocasiones) que como nos comenta, ofrece bastante complejidad a la hora de cosechar el cereal en comparación a otros países de Europa o incluso de regiones más al norte de España como puede ser el País Vasco, donde es más sencillo, por ejemplo, obtener paja de mayor calidad.

No obstante, su padre no puede evitar contar con orgullo como su hijo ha pasado de trabajar las 150 Ha de sus inicios a las 700 Ha actuales, pudiendo dedicar gracias a la mecanización y profesionalización de la labor mucho menos tiempo. “Antes me levantaba a las 4 o 5 de la mañana para trabajar, ahora mi hijo comienza a las 10”, “lo que antes trabajaba en una semana, ahora lo labra en un día”.

Al referirse a su concesionario, Talleres Casares, se muestra literalmente encantado y recalca que es una de las razones principales de su fidelidad a la marca. El estrecho y cercano trato de su mecánico, así como su efectividad, aseguran aún más si cabe su compromiso con Fendt. Tanto él como su padre, nos dicen ser conscientes de que todas las máquinas, por muy buenas que sean, se averían y el buen servicio del concesionario y la rápida respuesta, son fundamentales para decantarse por una u otra marca.

En el caso de Fendt, han encontrado en la figura del mecánico de Talleres Casares la persona que necesitan, que incluso en días festivos, no duda en acercarse a su explotación para ofrecerle una solución rápida y efectiva. La relación cliente/mecánico es sin duda inmejorable.

Del servicio postventa y de recambios de Fendt no recuerda haber tenido nunca una mala experiencia, si bien, desde su punto de vista, el plazo de entrega de los recambios es un aspecto mejorable.

Nos despedimos de Jesús no sin que este nos vuelva a dejar claro que no solo es un agricultor apasionado por su profesión, sino un orgulloso cliente de Fendt. A la hora de hablar de su próxima adquisición, no duda en hablar de Fendt gracias a su eficiencia, economía, profesionalidad y sobre todo al servicio de su concesionario y en especial de su mecánico.