En la actualidad, dirige ella misma un negocio agrícola con 2.500 hectáreas de terreno cultivable. Eso sí, existen otras muchas cosas que entusiasman a la doctorada Anna Catharina Voges. Le encanta la vida de la ciudad y todo lo que esta puede ofrecer. De hecho, necesita todo eso para conseguir una dosis adecuada de equilibrio y para lograr una distancia crítica, tal como explica Anna Catharina. Esta esbelta mujer acaba de llegar a su despacho después de atravesar el suelo empedrado de su granja. Dicho despacho es una casa blanca con entramados de madera y puertas de color verde hierba. Justo enfrente puede verse el edificio de la granja, que se encuentra en proceso de renovación. Con tono ligero, la jefa ejecutiva de Saat-Gut Plaussig Voges KG., una empresa con sede en esta localidad, afirma: “Quizás debería alquilarlo para fiestas”. Hay un parque que comienza justo detrás del edificio histórico. El río Parthe lo atraviesa con su curso sinuoso. Se trata de un estrecho río que nace en el Noreste, atraviesa el centro de Leipzig y llega hasta el suroeste de la ciudad, donde confluye con el Elster Blanco. Esta vía navegable conecta la ida del suburbio rural de Plausig-Portitz con la del centro de la ciudad. En el fondo, esta conexión refleja en muchos aspectos el carácter de Anna Catharina Voges, pues esta mujer vive justo en el centro de Leipzig, pero trabaja aquí, en el campo.